El renting de desfibriladores puede definirse como un contrato que se hace para alquilar un desfibrilador durante un determinado tiempo. Mientras dure, se abona una cantidad fija cada mes a cambio de poder disponer de un desfibrilador externo automático (DEA) o semiautomático (DESA), sin preocuparte por los costes de gestión y mantenimiento.
Las paradas cardíacas son una de las principales causas de muerte en nuestro país, llegando a la cifra de una cada 20 minutos. El principal problema es que aparecen sin avisar, pudiendo suceder en cualquier sitio. Para solventarlo, existen los espacios cardioprotegidos, destinados a que se realice la desfibrilación temprana, con el objetivo de que el ritmo cardíaco vuelva a su estado normal, salvando la vida de la víctima.
¿En qué consiste?
A la hora de crear un espacio cardioprotegido, realizar un renting de desfibriladores es una de las mejores opciones, sin importar si el sitio será público o privado. Dependiendo de la empresa con la que se solicite, existirán unas cuotas y unos gastos diferentes. Lo que está claro es que todos ellos incluyen el gasto que está asociado al uso que se le va a dar al desfibrilador y a su mantenimiento.
Estos planes son muy cómodos y te evitan tener que pagar una gran cantidad de dinero inicialmente, por lo que se puede definir como un alquiler a largo plazo. Por norma general, también viene incluido en el precio la formación necesaria para poder hacer un uso correcto del dispositivo.
Dependiendo del espacio donde se quiera instalar, es probable que también sea necesaria la instalación de una vitrina o tótem sobre el que esté situado el desfibrilador, y un dispositivo para poder llamar directamente al número de urgencias, con el que iniciar rápidamente la cadena de supervivencia. También se deberían incluir los recambios necesarios de baterías y electrodos. Lo importante es que, en caso de ser necesario, funcione de la mejor forma posible.
¿Es rentable?
Si se tiene en cuenta que el renting lleva incluido todos los servicios que son necesarios para que el espacio cardioprotegido funcione correctamente, está claro que merece la pena. Por otro lado, está la compra directa de un desfibrilador, al que se le tienen que añadir los costes de mantenimiento, recambios de componentes, etc. Existe un claro ahorro por parte de la persona que está interesada en hacer renting.
¿Qué ocurre cuando el contrato de renting finaliza?
Una vez concluido el plazo que se había contratado en el plan de renting, se puede optar por diferentes situaciones:
- Devolver el desfibrilador externo automático, teniendo la posibilidad de adquirir uno totalmente nuevo.
- Volver a hacer un contrato que prolongue su duración.
- Si se está contento con el servicio que el dispositivo ha prestado, se puede solicitar la recompra del equipo.
¿Por qué optar por el renting?
Entre los motivos por los que es beneficioso optar por el renting, se pueden destacar los siguientes:
- No existe ningún tipo de riesgo de operación ni económico para la empresa que lo solicita.
- Los costes son muy reducidos, por lo que, a la larga, estarás ahorrando dinero.
- Es la propia empresa que suministra el renting quien se hace cargo de la gestión y los documentos necesarios para su instalación.
- Se puede disfrutar de este servicio sin la necesidad de realizar un desembolso inicial, dado que se pagará una cuota mensual.
- Al estar ahorrando dinero, la tesorería de la empresa no se ve perjudicada, pudiendo desempeñar su función correctamente.
- No existe ninguna necesidad de que el bien contratado esté activo mediante la adquisición de este servicio.
- Se puede ver una mejora significativa en los ratios financieros.
- Existen ventajas fiscales que hacen que una empresa pueda ahorrar aún más dinero, como la deducción del IVA y el IRPF.
Ventajas del renting
Una de las principales ventajas de hacer renting, es que tiene beneficios fiscales. Si estás pensando en instalarlo en una empresa, el 100 % de IVA es un gasto que se puede deducir. Aunque también se encuentran las siguientes:
- Estarás preparado para que, en caso de que ocurra un paro cardíaco, se pueda salvar la vida a la víctima en muy poco tiempo, hasta que lleguen los servicios de urgencia.
- No tendrás que desembolsar una gran cantidad de dinero en una sola inversión.
- Tendrás a tu disposición un plan de cardioprotección.
- La empresa no se verá afectada por el CIRBE (Central de Riesgo), debido a que no está reflejado en ella, haciendo que tu capacidad de endeudamiento no se vea perjudicada.
- Cuando finalice el contrato, tienes varias opciones para realizar la que más se ajuste a tus necesidades. Esta acción se conoce con el nombre de Renovación Tecnológica.
El renting es uno de los métodos más valorados en la actualidad cuando se quiere crear un espacio cardioprotegido. No solo se estará protegido en el caso de que ocurra un paro cardíaco, sino que también estarás ahorrando dinero por ello.