No hay nada peor que ver que tu hijo necesita ayuda y no saber cómo brindársela. Los más pequeños de la casa son los más vulnerables a las lesiones, por ello, es importante saber cómo actuar en caso de que sufran alguna situación de emergencia.
¿Qué es la maniobra RCP?
Las maniobras de RCP (Reanimación Cardiopulmonar) son una técnica eficaz que puede llegar a salvar vidas en caso de que la víctima esté haciendo frente a un paro cardíaco o se esté ahogando. Aunque tus conocimientos no sean los mejores sobre ello, es mejor intentar algo a quedarse sin hacer nada, este factor puede llegar a salvar la vida a tu hijo.
La reanimación cardiopulmonar combina compresiones cardíacas (haciendo que la sangre se mantenga oxigenada y en circulación hasta que las palpitaciones puedan reestablecerse), con respiración boca a boca (para suministrar oxígeno a los pulmones).
Cómo actuar dependiendo de la edad del niño
Dependiendo de si tu hijo es un bebé o no, se deberán realizar una serie de acciones distintas:
1. Bebés
- Llama a los servicios de emergencia (112).
- El primer paso cuando se ha comprobado que el bebé no tiene respiración y no responde, es llevarlo a una superficie plana y dura.
- Empezar con las compresiones torácicas poniendo dos dedos en el esternón (debajo de los pezones) y presionando unos 4 cm. Después, deja que el pecho vuelva a su posición habitual. El pecho debe ser presionado 100 veces por minuto y realizar 30 compresiones.
- Respira normal, cubre la boca y la nariz del bebé con tu boca y expulsa dos bocanadas de aire, una cada segundo, fijándote en que el pecho se levante.
- Vuelve a realizar las compresiones torácicas, proporcionando 2 bocanadas de aire cada 30 compresiones.
2. Niños (1 a 18 años)
- Llama a los servicios de emergencia (112).
- Sitúa el talón de la mano en la parte inferior del esternón, presiona el pecho 5 cm y deja que vuelva a su posición habitual. Oprime entre 100 y 120 veces por minuto y realiza 30 compresiones.
- Cierra la nariz de la víctima con los dedos y cobre la boca del niño con la tuya, expulsa dos bocanadas de aire, una cada segundo, fijándote en que el pecho se levante.
- Vuelve a realizar las compresiones torácicas, proporcionando 2 bocanadas de aire cada 30 compresiones.